Este año en Literatura Universal hemos decidido poner en marcha un proyecto para hacer que las clases de esta asignatura sean diferentes al método tradicional e igualmente fructíferas.

Esta idea surge de un movimiento literario que comienza con Margarita de Navarra, en la corte francesa del siglo XVI. Cuando se reunían en la corte los mejores compositores de la época y la nobleza se divertía comentando y debatiendo acerca de lo que habían escuchado o leído. Más adelante este fenómeno se pondrá de moda en Francia y en España con el Siglo de las Luces para llegar a convertirse en estas típicas tertulias acompañadas de un buen café a partir del siglo XIX.

Esto mismo hacemos en clase con los alumnos. Aprovechando que tenemos dos horas de clase en el mismo día, dos veces por semana, dedicamos una primera hora a impregnarnos de todo ese saber literario, a trabajar todo el contenido teórico para pasar después a comentarlo durante la segunda hora acompañando este interesante debate de un buen café.

La verdad es que está surtiendo el efecto deseado: ellos aprenden, disfrutan y las clases son distintas. Como dicen ellos: Estáis invitados… ¡pero a cambio de un café!