En el año de San José, declarado por el Papa Francisco, el colegio cambió su escenario para celebrar su patrón con más ilusión y entusiasmo que nunca.

Se trata de una de las fechas más señaladas en el calendario escolar. Un día de fiesta. Las circunstancias impidieron que, como otros años, se pudiera celebrar con competiciones deportivas entre cursos y el tradicional cross. No nos olvidamos de la ofrenda floral. Los alumnos más pequeños rindieron homenaje al mosaico de San José, que luce en el patio del colegio. Trabajamos su figura, su amparo y protección. Y disfrutamos de actividades al aire libre, deporte y juegos por grupos de convivencia estable.

Un día distendido, agradecido y divertido que refuerza los valores del compañerismo y la amistad y la cercanía de profesores y alumnos con actividades lúdicas.